Mi entrañable amigo: ¿Cómo estás? ¿Va bien tu semana, tu vida comunitaria, tu misión, tu afectividad, tu ilusión? Yo estoy bien, con mucho trabajo escolar y con la salud un poco estropeada, pero siempre con el ánimo alto y la ilusión desbordante. Eso sí, con un invierno cambiante en el que seguimos con un clima más propio de la primavera que del invierno. Lo que no sé si sabes es que Febrero deriva de “Februare” que significa “limpiarse”, y en que en este mes se celebraban las antiguas fiestas dedicadas por los romanos a los difuntos, llamadas “februaria”. Un tiempo por tanto, como lo es cada día del año, sea invierno o verano, para limpiarse, purificarse, ser consciente de la vida, vivirla en profundidad, aprovechar cada oportunidad. Y recordar, cómo no, a nuestros seres queridos que un día se fueron físicamente de nuestro lado pero que nunca abandonaron nuestro recuerdo y nuestro corazón. Y a propósito de esto, he visto hace unos días la última película del genial Clint Eastwoo...
"Si esperas a sanar tus heridas y estar bien contigo mismo para después amar y servir, no alcanzarás la mayor plenitud humana, la que resulta de dar-te a los demás desde un amor profundo y un servicio alegre" @Lalovixi