La religión es el núcleo de la cultura. La experiencia de Dios es el núcleo de la religión. No hay cultura sin religión. No hay religión sin actos religiosos. Los paradigmas contenidos existenciales densos no discursivos se transmiten a través de los actos religiosos. La experiencia de Dios es el núcleo de identidad de la religión y de la cultura. La experiencia de Dios como contacto con lo real. Raíz indoeuropea sak “conferir existencia”, “hacer que algo llegue a ser real” (Melloni, Lo uno y lo múltiple) Del vocalo sak vienen palabras como sagrado, sacrificio, sacerdote, santo, etc. Una experiencia de Dios se vuelve la experiencia fundante de una tradición religiosa. Se vive como una “revelación”, la irrupción de algo (Alguien) que inicialmente no era obvio y que de pronto se volvió perceptible, inteligible, referente último y definitivo. La experiencia religiosa implica a una persona que la ha vivido: el místico fundador. Significa ser liberado de la angustia de ...
"Si esperas a sanar tus heridas y estar bien contigo mismo para después amar y servir, no alcanzarás la mayor plenitud humana, la que resulta de dar-te a los demás desde un amor profundo y un servicio alegre" @Lalovixi