Contemplé un pájaro pequeñito. Era negro de cabeza, alas y cola. Tenía su pecho amarillo. Cantaba muy bonito. Luego en el mismo arbusto se paro otro pajarillo. Era negro con pecho y cabeza rojos.
aquí también hay mosquitos en la orilla del rió, y pican como el chaquiste. A unos cincuenta metros de la piedra donde estaba sentado vi tres caballos retozando, buscando bañarse con los últimos rayos del sol. Uno era blanco, era el más grande. había otro negro con la frente blanca y otro era pinto de café con blanco. Me miraron pero no se asustaron. Yo continué mi oración y ellos siguieron parados corriendo primero y después golpeando sus cascos con las rocas del río.
Triste estoy porque acaba de pasar un camión lleno de troncos cortados.
!Nos estamos acabando los árboles!”
EAS
aquí también hay mosquitos en la orilla del rió, y pican como el chaquiste. A unos cincuenta metros de la piedra donde estaba sentado vi tres caballos retozando, buscando bañarse con los últimos rayos del sol. Uno era blanco, era el más grande. había otro negro con la frente blanca y otro era pinto de café con blanco. Me miraron pero no se asustaron. Yo continué mi oración y ellos siguieron parados corriendo primero y después golpeando sus cascos con las rocas del río.
Triste estoy porque acaba de pasar un camión lleno de troncos cortados.
!Nos estamos acabando los árboles!”
EAS
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