Ir al contenido principal

El verdadero sentido de la Tolerancia

Por: Edmundo Becerril Alba.

Creo que estaremos todos de acuerdo en que la tolerancia como tal es un valor, o sea es una virtud, luego entonces la persona que busca ser tolerante o que admira la tolerancia es una persona que apunta hacia la virtud, es decir busca ser virtuoso.

En este sentido para poder hablar o definir que es la tolerancia, tendríamos que analizar lo que en sí significa la Virtud, ¿Qué es la virtud? Ante esta pregunta todos aparentemente tendremos alguna respuesta o noción, “La Virtud” es lo aceptable, lo correcto, lo que es en sí bueno, como vemos es un concepto difícil de descifrar. En este sentido es preciso dilucidar para tener una idea más completa que la Virtud como tal posee un valor espiritual y tiene mérito, entendido éste como un esfuerzo positivo del hombre, y lo contrario al mérito es la culpa, luego entonces llegaremos a la conclusión de que donde hay culpa no puede haber virtud.

La tolerancia esta inmersa en el conocimiento, porque la tolerancia no pertenece al ignorante, sino al sabio, ¿Pero que es lo que sabe el tolerante? Pues esta claro que conoce lo que es debido y es indebido, lo que es correcto y lo que es incorrecto y en sentido último lo que es bueno y lo que es malo, ya que si el tolerante no supiera donde esta lo bueno o lo malo, lo correcto o lo incorrecto, lo digno o lo servil, no sería tal, sino a lo sumo un ser ignorante que ostenta ser tolerante.

De ésta suerte tenemos que a la “Tolerancia” le precede el conocimiento pero ¿Qué clase de conocimiento? ¿Un conocimiento certero o un conocimiento ambiguo?, ¿un conocimiento claro, lúcido y nítido o un conocimiento a medias?

Ahora bien preguntémonos si el conocimiento que tiene el Tolerante, es un conocimiento Verdadero, si es un conocimiento de naturaleza perpetua o fija o no lo es, de ésta forma veremos que la Tolerancia y el conocimiento Verdadero no pueden estar separados, ya que por fuerza lógica un ignorante no puede ser tolerante, y el tolerante necesita del conocimiento verdadero. A éste punto surgiría otra cuestión ¿Qué es el conocimiento verdadero? ¿Qué cosa es la verdad?

De esta forma tenemos que no puede existir Tolerancia sin Verdad, por lo tanto aquella persona que niega que exista la verdad o que la verdad no puede ser conocida o poseída, no tiene autoridad moral ni lógica para alabar a alguien como “Tolerante” ó criticar de “Intolerante” ya que la tolerancia y el Conocimiento verdadero son inseparables como lo es la conformación del AGUA con dos moléculas de hidrógeno y una de oxígeno.

De igual forma una persona intolerante, es precisamente aquella que conoce o intuye el bien o el conocimiento verdadero pero no lo acepta, de ésta forma tenemos el extremo opuesto, ya que si la Tolerancia es una Virtud, y como tal implica mérito, la Intolerancia es un defecto que implica Culpa, es precisamente porque el intolerante se negó a conocer, escuchar o acatar el “Conocimiento Verdadero” luego entonces tenemos que el intolerante también tiene un conocimiento verdadero pero no lo acepta como tal.

Si el tolerante tiene mérito y el intolerante tiene culpa, es porque ambos participaron de un conocimiento verdadero en algún grado. Es así que tenemos que el ignorante o la persona que quiere permanecer en la ignorancia no tendría ni mérito ni culpa porque todo lo ignora... hasta que es ignorante.

La Tolerancia, es una virtud y esta íntimamente relacionada con la Verdad, ya que sin verdad no puede existir la tolerancia, es decir, hablar de la tolerancia es hablar de su presupuesto básico el cual es “la verdad” ya que éste será el parámetro para dilucidar qué es lo correcto o lo incorrecto, lo debido o lo indebido.

La Verdad, subsiste por sí misma, y no esta sujeta a la democracia, la verdad precede al intelecto porque la libertad del intelecto no es quien crea a la verdad, ya que es sabido que una cosa es decir la verdad y otra cosa distinta es creer lo que se dice.

Ahora bien, quien se atreva a afirmar que la verdad no puede ser conocida, cae por sí mismo en una contradicción, porque si es verdad que la verdad no puede ser conocida y ésta afirmación es verdadera, luego entonces tenemos que es verdad y que ese enunciado sería verdadero, y al menos tendríamos una verdad conocida, destruyendo éste razonamiento a su mismo planteamiento.

En este orden de ideas tenemos que quien niega aceptar la verdad, o que exista la Verdad o que ésta no puede ser conocida o poseída, no puede jactarse de conocer qué cosa es la Tolerancia, ni jactarse de ser Tolerante o acusar a alguien de intolerante, ya que si lo hace sería un mentiroso intolerante o bien en el mejor de los casos un ignorante, ya que en todo caso el intolerante es precisamente aquel que niega que la verdad sea conocida o aquel que no soporta a la Verdad.

La tolerancia soporta a la intolerancia, a la ignorancia y a cualquier género de mal, esta relacionada con la virtud de la prudencia y la paciencia ya que simula no dar por entendido algo con el único objeto de no causar un mal mayor y procurar un bien mayor.

La intolerancia ataca y es intolerante con el tolerante.

La tolerancia es Virtud, una persona tolerante es una persona comprensiva, compasiva, prudente, paciente, honesta, en una palabra es una persona virtuosa.

Pero surge la pregunta ¿Cómo ejercer la virtud de la tolerancia?
Creo que primeramente debemos ser tolerantes con nosotros mismos, ya que nadie da lo que no tiene, sí, ser tolerantes con nosotros mismos es valorar seriamente nuestras virtudes y nuestros defectos, pero no con la intención de enfrascarnos en un conformismo estéril sino con miras a mejorar. Ya que la tolerancia no es una simulación de una no apreciación de los defectos propios (como se dice vulgarmente la tolerancia no es solapadera), sino en sí afrontar esos defectos con entereza con miras a la superación personal, es decir, procurar un bien mayor.

Ahora bien para ser tolerantes con los demás, primero se necesita haber sido tolerantes con nosotros mismos, porque tal vez nos encontremos con la sorpresa de que tengamos nosotros más defectos que el supuesto tolerado, es decir la tolerancia es prudencia y honestidad. La tolerancia es una virtud porque implica un esfuerzo sobrehumano de prudencia.

Y por último ¿Cuándo termina la tolerancia? porque tampoco sería aceptable que por el prurito de ser “tolerantes” jamás actuemos o nos preocupemos por el bien de nuestro tolerado, y lo dejemos solo en su desventura y desgracia. No, la tolerancia no es indiferencia, la tolerancia es Compasión, en cierto sentido es Ayuda, y en última y definitiva instancia es amor.

Comentarios

Entradas populares de este blog

El dinero es buen sirviente y mal amo

El dinero justo. Por Mikel Agirregabiria Tener suerte con el dinero es que nunca falte y que tampoco sobre.Lo preferible es contar con el dinero apropiado, que es ni poco… ni mucho. Ser pobre debe resultar duro, frustrante y limitador, pero también el dinero en abundancia estresa, insensibiliza e idiotiza. El dinero es una bendición para el pobre y una maldición para el avaro. Séneca decía que “La mejor medida para el dinero es aquélla que no deja caer en la pobreza, ni permite alejarse mucho de ella”. Hay que ser suficientemente rico para no verse atormentado por la penuria y suficientemente pobre para conocer el valor del dinero. El dinero es un bien y un mal en sí mismo. El dinero es la llave y la mancha del mundo. El dinero hace falta para ser honrados y para alimentar mantener el cuerpo y el alma. Algún dinero evita preocupaciones; mucho, las atrae. Jean Paul Getty, el multimillonario que decía que si puedes contar tu dinero no eres un verdaderamente rico, señaló: “Cuando no se ti

Reportándome después de EEEE y hospital

26 de marzo de 2009 A mi familia y amigos: Ya estoy de regreso en el noviciado (Cd Guzman, Jal) después de una intensa experiencia de poco menos de dos meses en el Hospital para enfermos crónicos, Dr Gustavo Baz Prada, ubicado en Tepexpan, Acolman, Estado de México. (A 17 km de las pirámides de Teotihuacán). Antes viví - y terminé profundamente agradecido-, los Ejercicios Espirituales de mes, en la casa de ejercicios de Puente grande Jal. Ignacio de Loyola, nuestro fundador, consigna así, el objetivo la experiencia de hospitales para el novicio jesuita: “Sirviendo en hospitales o en alguno de ellos por otro mes, comiendo y durmiendo en el o en ellos, o por algunas horas en el día, según los tiempos, lugares y personas, ayudando y sirviendo a todos enfermos y sanos, según le fuere ordenado, por mas se abajar y humillar, dando entera señal de si, que se apartan de todo el século (lo mundano) y sus vanidades para servir en todo a su Criador y Señor crucificado por ellos” Constitucion

Principio y fundamento Pedro Arrupe

Me dio muchísimo gusto saber noticias tuyas y de tu familia y poderte dedicar estas letras. Te dejo con un texto del Padre Pedro Arrupe, que fue General de la Compañía de Jesús: “No hay nada más práctico que encontrar a Dios. Es decir, enamorarse rotundamente y sin ver atrás. Aquello de lo que te enamores, lo que arrebate tu imaginación, afectará todo. Determinará lo que te haga levantar por la mañana, lo que harás con tus atardeceres, cómo pases tus fines de semana, lo que leas, a quien conozcas, lo que te rompa el corazón, y lo que te llene de asombro con alegría y agradecimiento. Enamórate, permanece enamorado, Y esto lo decidirá todo” Pedro Arrupe. Te quiero mucho, tu hermano en Jesucristo N.S. Lalo